MISTERIO

China planea enviar monos a su estación espacial para experimento de procreación

Los científicos chinos planean enviar monos a su nueva estación espacial Tiangong para experimentos que involucrarán el apareamiento de los animales y potencialmente su reproducción.

El potencialmente controvertido experimento podría tener implicaciones importantes para nuestros esfuerzos por colonizar el espacio: ¿pueden los mamíferos —incluyendo, desde luego, los humanos— reproducirse con éxito más allá de la Tierra?

Según informa el South China Morning Post (SCMP), la investigación se llevará a cabo en la cápsula más grande de la estación, llamada Wentian, dentro de dos gabinetes de pruebas biológicas que se pueden expandir.

Después de examinar el comportamiento de criaturas más pequeñas, «tendrán lugar algunos estudios con ratones y macacos para ver cómo crecen o incluso se reproducen en el espacio», dijo Zhang Lu, investigador de la Academia de Ciencias de China en Pekín, durante un discurso publicado en las redes sociales la semana pasada.

«Estos experimentos ayudarán a mejorar nuestra comprensión de la adaptación de un organismo a la microgravedad y otros entornos espaciales», agregó.

Se ha observado que algunos organismos más simples, incluidos los nematodos y el pez arroz japonés, se reproducen en el espacio. Pero formas de vida más complejas han tenido dificultades. En 2014, un experimento ruso para ver si los geckos podían tener descendencia en el espacio fracasó cuando todos los reptiles murieron. Y la tasa de fracaso de los mamíferos, hasta ahora, ha sido total. Los científicos de la Unión Soviética lograron que los ratones se aparearan durante un vuelo espacial en 1979, pero ninguno de ellos dio a luz después de regresar a la Tierra.

En otras palabras, lograr que los monos se reproduzcan a bordo de una estación espacial no será nada fácil. Por un lado, el simple hecho de tratar con criaturas vivas en el espacio puede plantear desafíos inmensos. Los astronautas «necesitarán alimentarlos y lidiar con los desechos», dijo al SCMP Kehkooi Kee, profesor de la escuela de medicina de la Universidad de Tsinghua.

Luego está el hecho de que los astronautas tendrán que mantener a los macacos felices y cómodos, algo que, según los expertos, será un desafío, ya que el confinamiento a largo plazo en los entornos espartanos de los hábitats espaciales podría causar un estrés inmenso a los simios.

El módulo de laboratorio Wentian para la estación espacial Tiangong de China completó la transposición en órbita el pasado 30 de septiembre. Foto: CNSA.

Pero incluso si los astronautas generan con éxito el ambiente y estado de ánimo adecuados para los monos, se predice que la física del sexo en el espacio será un desafío.

«En primer lugar, es difícil mantenerse en contacto cercano entre sí bajo gravedad cero», escribió Adam Watkins, profesor asociado de fisiología reproductiva en la Universidad de Nottingham, en una carta abierta de 2020 destacada por SCMP. «En segundo lugar, dado que los astronautas experimentan una presión arterial más baja mientras están en el espacio, mantener las erecciones y la excitación son más problemáticos que aquí en la Tierra».

Con su nueva estación espacial casi en completo funcionamiento, China no está rehuyendo tratar con algunas cuestiones importantes, pero el que estos experimentos se desarrollen como se espera, es todo menos menos seguro.

Fuente: SCMP. Edición: MP.