MISTERIO

Así se ve la Tierra desde la cápsula de la misión Artemis I lanzada esta semana

Mientras se dirige a la Luna, la cápsula espacial Orión de la NASA ha enviado instantáneas de la «canica azul» de la que partió.

Crédito: NASA.

Una nueva era espacial inició en las primeras horas del pasado 16 de noviembre, cuando el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) de la agencia elevó gloriosamente a Artemis I, la misión que representa el puntapié inicial del regreso de la humanidad a la Luna.

Horas después del despegue, una cámara montada en uno de los cuatro paneles solares de la cápsula Orión giró para capturar una vista del módulo de servicio de la nave construido en Europa, con nuestro planeta medio sombreado contra el fondo negro del espacio.

«Orión mirando hacia atrás a la Tierra mientras viaja hacia la Luna, a 57.000 millas (92.000 km) de distancia del lugar que llamamos hogar», entonó Sandra Jones de la NASA mientras bajaban las imágenes.

El propósito principal de las 16 cámaras de la cápsula es monitorear el desempeño de los componentes desde el lanzamiento hasta el amerizaje —cuando regrese en poco menos de 1 mes—, por dentro y por fuera. Las cuatro cámaras en los paneles solares también pueden tomar fotografías de la Tierra, además de fotografías de la Luna a medida que Orión se acerca.

«Muchas personas le ven un aire a la clásica foto “Salida de la Tierra” (EarthRise) tomada por Apolo 8», dijo David Melendrez, líder de integración de imágenes del Programa Orión en el Centro Espacial Johnson de la NASA. «Las imágenes capturadas durante la misión serán diferentes a las que la humanidad vio durante las misiones Apolo, pero capturar eventos importantes como la salida de la Tierra, la distancia más lejana de Orión a la Tierra y el sobrevuelo lunar será una alta prioridad».

Y tomar selfis con la Tierra no fue lo único que hicieron Orión y el equipo de Artemis 1 en las primeras 24 horas de la misión: se desplegaron 10 satélites del tamaño de una caja de zapatos desde la etapa superior del SLS después de la inyección translunar.

«La Salida de la Tierra» es la famosa imagen tomada desde el Apolo 8.

Uno de los CubeSats, Lunar IceCube, buscará señales de hielo de agua en la Luna. Otro satélite, LunIR, tomará imágenes de la superficie lunar para caracterizar su entorno térmico. El satélite Omotenashi de Japón intentará hacer un alunizaje «semidifícil» pero posible; mientras que el NEA Scout de la NASA está diseñado para desplegar una vela solar y volar para estudiar un asteroide cercano a la Tierra.

En las próximas semanas, el equipo de Artemis I monitoreará el desempeño de Orión, como una prueba para una misión tripulada alrededor de la Luna programada para 2024 y un alunizaje tripulado programado tentativamente para 2025.

Tres maniquíes están sentados en los asientos de Orión, conectados con sensores para recopilar datos sobre la exposición a la radiación y otros aspectos del entorno espacial.

El próximo gran hito de la misión llegará el 21 de noviembre, cuando la cápsula debe hacer su acercamiento más próximo a la Luna, pasando a una altitud de aproximadamente 60 millas (96.5 km). La nave espacial encenderá su motor principal y aprovechará el campo gravitatorio lunar para maniobrar en una órbita circular que se extiende hasta 40,000 millas.

La prueba de fuego se producirá cuando regrese a la Tierra y vuelva a entrar en la atmósfera a una velocidad de 24.500 mph (39.428 kph).

Fuente: UT. Edición: MP.