Alienígenas ocultaron un ‘trono de hierro’ en las pirámides de Egipto
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Las pirámides de Egipto y su posible vinculación con un trono de hierro extraterrestre
Las pirámides de Egipto han sido objeto de diversos estudios desde hace muchísimos años y cada nuevo descubrimiento hace que los investigadores sientan más curiosidad por ellas. Uno de los últimos grandes hallazgos ocurrió en noviembre del 2017 en la pirámide de Keops, en el cual los científicos Mehdi Tayoubi y Kunihiro Morishima de la Universidad de Nagoya en Japón y el Hip Institute de París, revelaron los resultados del proyecto Scan Pyramids, alegando que en aquella edificación se encontraba un trono de hierro y se presume que fue elaborado por extraterrestres.
El proyecto se basó en la recolección de partículas elementales que se originan a partir de los rayos cósmicos, cuya absorción se realiza de manera muy diferente de las partículas comunes de nuestro planeta, es decir, se elaboró una especie de radiografía en la pirámide de Keops, resultando una técnica bastante novedosa y para nada invasiva. Luego de realizarse la recolección, los resultados arrojaron un vacío de al menos 30 metros de largo dentro de la pirámide y tras tantas investigaciones y lecturas de los textos antiguos, se llegó a la conclusión de que se trataba de un trono de hierro.
Si bien hasta los momentos solo se mantiene la hipótesis en la pirámide de keops, es posible que en el resto de las pirámides también se encuentre un trono con materiales extraterrestres.
Muchos egiptologos y expertos de las civilizaciones del antiguo Egipto, saben perfectamente que su tecnología estaba estrechamente relacionada con la intervención de seres híbridos de origen extraterrestre.
¿Fueron los Faraones del Antiguo Egipto Híbridos alienigenas quienes con su Tecnología construyeron las Pirámides de Giza? Los investigadores creen que los extraterrestres han dejado una pista fundamental para su diseño en Giza, Egipto, a saber, sus coordenadas. La velocidad de la luz es de 299.792.458 metros por segundo y las coordenadas geográficas de la Gran Pirámide son 29.9792.458 ° N.
Otro investigador escribe: “La velocidad de la luz en el sistema métrico aparece en el diseño y posición de la Gran Pirámide, cuando el punto decimal se desliza a lo largo del valor. Los alienígenas han elegido este lugar por una razón. Esta sorprendente similitud es difícil de aceptar como una coincidencia. No hay duda de que se trata de un diseño matemáticamente inteligente asociado a la creencia en las estrellas de sus constructores.
Los teóricos de la conspiración están convencidos de que la Pirámide fue construida por alienígenas apodados “astronautas antiguos“. Presumiblemente ellos visitaron la Tierra hace miles de años, estudiaron diferentes tribus y fueron confundidos con dioses. ¿Son estos Pueblos Estelares que visitaron la Tierra hace miles de años los mismos que colonizaron el Sistema Solar? Hay más de una sospecha de esto. No en casa se encuentran las pirámides también en la Luna, Marte y asteroides dispersos en nuestro sistema estelar. En la Luna y Marte podemos encontrar edificios, monumentos, estatuas y puestos avanzados alienígenas.
El estudio genético sugiere que los faraones del Antiguo Egipto eran híbridos extraterrestres.
Las investigaciones más recientes en relación a todo esto, sugieren que existe un linaje en el ADN de los faraones que estaría estrechamente relacionado con algún tipo de intervención genética realizada por una raza muy avanzada de alienigenas. Para muchos esto significa la evidencia final, de que los verdaderos responsables y creadores de las pirámides, fueron los antiguos visitantes extraterrestres. ¿Debemos realizar algún cambio en como escribimos la historia?
Fleischmann y su equipo presentaron muestras de ADN en un proceso llamado Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR). En el campo de la biología molecular, esta técnica se utiliza a menudo para replicar y amplificar una sola copia de una pieza de ADN, proporcionando a los investigadores una imagen clara de la huella genética de alguien.
Ocho nuevas muestras mostraron resultados interesantes pero triviales. El noveno campeón pertenecía en cambio a Akenatón, la enigmática figura feminista y revolucionaria del siglo XIV a.C., el padre de Tutankamón. Esta investigación reveló que Akenatón tenía una capacidad craneal mucho mayor que la media, debido a la necesidad de acomodar una corteza más imponente. ¿Pero qué mutación humana permitiría que el cerebro creciera tanto? Todavía no hemos descubierto una técnica a pesar de los años de progreso científico en el campo de la genética.
¿Sería este antiguo testimonio de hace 3.300 años un signo de manipulación genética en la antigüedad? ¿Fue el trabajo de seres avanzados? Fleischmann explica que: “La telomerasa (un gen enzimático) sólo se utiliza en dos procesos: envejecimiento extremo o mutación extrema. Los datos arqueológicos y genéticos sugieren que Amenhotep IV o Amenhotep IV/Akhenaten ha vivido hasta sus 45 años. Esto es suficiente para agotar todo el kit de telomerasa cromosómica, dejando atrás una explicación embarazosa pero plausible.
En Keops, hay 4 canales de los cuales solo uno, de la zona sur, ha sido explorado, permaneciendo entonces las del eje norte completamente selladas. Según la historia, todos los canales representan las puertas del cielo que el Faraón debería pasar para poder sentarse en su trono de hierro después de la muerte.
Una de las teorías más aceptadas sobre este trono, es que proviene del espacio y que fue elaborado por extraterrestres, pues se cree que el hierro que compone al trono, es de meteoritos que impactaron en la tierra en la época de los Faraones. Un ejemplo claro de este material espacial es la daga de Tutankamon.