Desentierran un medallón de la diosa Afrodita de 2.100 años de antigüedad en la tumba de una sacerdotisa
Fue desenterrado en la tumba de una sacerdotisa en la costa noreste del mar Negro.
Con 2.100 años de antigüedad, el medallón también tiene representados diez de los doce signos del zodíaco conocidos —faltan Acuario y Libra—, proporcionando información sobre las prácticas religiosas en el momento de su creación.
El hallazgo, en opinión de los arqueólogos, plantea la posibilidad de que la mujer enterrada fuera una sacerdotisa de Afrodita, la diosa de la belleza y el amor. Los anillos, aretes de plata y otros ajuares funerarios que se dedicaron a la diosa llevaron a estas conclusiones.
La tumba se encuentra entre una serie de hallazgos sorprendentes desenterrados este verano en un sitio cerca de la costa de la península de Tamán en el sur de Rusia —al este de la península de Crimea y entre el mar Negro y el mar de Azov—.
Según el portavoz de la Fundación Volnoe Delo, Ruben Bunyatyan, los arqueólogos Nikolay Sudarev y Mikhail Treister hallaron la tumba de la mujer durante la temporada de verano de 2022 de la expedición arqueológica Fanagoria.
El historiador griego Hecateo de Mileto contó que Fanagoria fue fundada en el siglo VI a.C. por refugiados de Teos, una ciudad griega en la costa de Anatolia que ahora forma parte de la actual Turquía.
Afrodita Urania
Si bien los arqueólogos desconocen por qué faltan dos signos, la inclusión del zodíaco indica que el medallón es una representación de «Afrodita Urania», el aspecto celestial de la diosa, a diferencia de su aspecto terrenal, «Afrodita Pandemos».
También sugiere una creencia en la astrología, la idea de que las posiciones de los cuerpos celestes pueden influir en los eventos en la Tierra, que estaba muy extendida en todo el mundo antiguo.
El medallón de plata encontrado en la tumba tiene unos 7 centímetros de diámetro y 15 milímetros de grosor. Muestra la cabeza, los hombros y las manos en relieve de Afrodita, basada en otras representaciones iconográficas contemporáneas.
«Dichos medallones eran comunes en el territorio del Reino de Bósforo desde hace 2.300 años», dijo Maria Chashuk, investigadora principal asociada de la expedición arqueológica Fanagoria. «Los de este tipo se usaban de muchas maneras: como broches, como accesorios para la cabeza y como colgantes».
Tumba de guerrero
Otro hallazgo intrigante en el sitio del mar Negro fue la tumba de un guerrero con una espada que se había hecho en el Irán medieval temprano, al estilo sasánida —o del segundo Imperio persa—. Los investigadores piensan que pudo haber sido un regalo diplomático o bien haber sido tomada como un trofeo militar.
Según el comunicado de la Fundación Volnoe Delo, «esta enorme, costosa y prestigiosa espada formaba parte del equipamiento de los jinetes de la era de la Gran Migración», un período en el que gran parte de Europa y Asia occidental se vio amenazada por invasiones de pueblos de Asia Central, como los hunos.
«Este hallazgo único no solo refleja los gustos de los guerreros de la antigüedad tardía de la península de Tamán, sino que también sugiere que a mediados del primer milenio, Fanagoria tenía estrechos vínculos políticos y culturales con el Imperio sasánida», aseguraron los investigadores.
La tumba del guerrero de siglo I a.C. también contenía fragmentos de un arnés de caballo, hebillas, puntas de cinturón, jarros de vidrio, utensilios y cajas de madera, así como un jarro de cerámica, cuentas, un espejo de latón y unas tijeras de hierro.
Fuente: Fundación Volnoe Delo. Edición: MP.