Descubren que el extraño Spinosaurio podía nadar y cazar en el agua
El descubrimiento de la cola fosilizada de un Spinosaurio, que algunos recordarán por la tercera parte de Jurassic Park, sugiere que estos enormes depredadores eran acuáticos y utilizaban su cola para propulsarse y nadar en busca de presas hace millones de años.
«Este hallazgo abre nuestro ojos a un nuevo mundo de posibilidades sobre los dinosaurios», dijo el paleontólogo Nizar Ibrahim de la Universidad de Detroit Mercy. «No solo agrega un capítulo a la narrativa existente, sino que empieza una nueva y drásticamente cambia las cosas en términos de lo que creemos saber que hacían estas criaturas».
Siglos atrás, los científicos especularon que los dinosaurios tal vez pudieron aventurarse y vivir en ambientes acuáticos, pero en décadas recientes esta idea fue desmerecida en favor de otras teorías que afirman que los dinosaurios no-aviares estaban limitados a deambular en la tierra.
El Spinosaurio (Spinosaurus aegyptiacus), empero, ha complicado el asunto, con algunos de sus huesos fósiles sugiriendo posible evidencia de adaptaciones semi-acuáticas.
En una investigación previa, Ibrahim y su equipo habían estudiado tal posibilidad, pero otros colegas no estaban tan seguros de las conclusiones a las que se había llegado. Ahora, los paleontólogos creen haber encontrado «la primera evidencia inequívoca de una estructura de propulsión acuática en un dinosaurio».
La evidencia consiste en una cola gigante en forma de aleta, descubierta en depósitos sedimentarios del Cretácico en el desierto del Sahara, en el este de Marruecos.
Con una edad de entre 90 y 100 millones de años de antigüedad, la cola hallada completa la imagen de cómo lucía realmente un Spinosaurio, ampliando nuestra perspectiva del único esqueleto existente de esta especie (el otro que existía fue destruido durante la Segunda Guerra Mundial).
«Este dinosaurio tenía una cola con una forma inesperada y única, caracterizada por tener espinas dorsales extremadamente largas y cheurones, que formaban un órgano largo y flexible como una aleta, capaz de una gran oscilación lateral», escriben los investigadores.
En el estudio publicado, el equipo examinó la cantidad de impulso que esta estructura podría haber generado cuando nadaba a través del agua, concluyendo que el desempeño era comparable al de vertebrados acuáticos actuales con apéndices similares.
En otras palabras, el Spinosaurio representa la mejor evidencia posible de que los dinosaurios —o al menos esta especie en particular— podrían haber sido nadadores.
«Nuestro descubrimiento es el tiro de gracia para la idea que los dinosaurios no-aviares jamás invadieron el reino acuático», sentenció Ibrahim. «Este dinosaurio perseguía activamente a sus presas en el agua, no se conformaba solo con pararse en aguas pocas profundas a la espera de peces. Probablemente pasó la mayor parte de su vida en el agua».
Fuente: ScienceAlert.