La tumba circular más grande del mundo antiguo se abrirá en Roma
Augusto fue el sobrino-nieto de Julio César y el primer emperador romano. Su enorme mausoleo circular supo ser el monumento funerario más grande de la ciudad cuando se construyó, en el siglo I a.C. Y ahora, tras siglos de olvido, volverá a su antigua gloria.
El mausoleo comenzó a ser construido por Augusto en el año 29 a.C. a su vuelta de Alejandría, tras haber conquistado Egipto después de vencer a Marco Antonio en la batalla de Actium del año 31 a.C. En su estancia en Alejandría había visto la tumba helenística de Alejandro Magno, probablemente de planta circular, en la cual se inspiró para la construcción de su propia tumba.
El monumento medía 87 metros de diámetro y tenía dos obeliscos en su entrada. El interior estaba repleto de pasillos concéntricos unidos entre sí, donde se albergaban las urnas con las cenizas de los diferentes personajes de la familia imperial.
El primer personaje enterrado fue Marco Claudio Marcelo, sobrino de Augusto, muerto en el año 23 a.C. Le siguieron Marco Vipsanio Agripa, Druso el Mayor, Lucio César y Cayo César. Augusto fue enterrado en el año 14, seguido por Druso el Menor, Livia y Tiberio. Se desconoce si el emperador Claudio fue sepultado también en el mismo lugar. El último personaje en recibir sepultura fue Nerva, en el año 98. Su sucesor, Trajano fue incinerado y sus cenizas se depositaron en una urna de oro a los pies de la columna Trajana.
En 410, durante el saqueo de Roma, los Godos asaltaron el mausoleo y dispersaron las cenizas de Augusto.
La restauración
El que otrora fuera lugar de enterramiento, sufrió todo tipo de avatares a lo largo de los tiempos, siendo utilizado como viñedo, jardín, e incluso fortaleza medieval y plaza de toros en el siglo XVIII, por lo cual las ruinas originales fueron sumando construcciones poco respetuosas, pero que las mantuvieron en uso y a la larga evitaron su total pérdida.
Durante el gobierno de Benito Mussolini se inició la retirada de los añadidos, pero el proyecto no llegó a terminarse por la caída del régimen dictatorial, y en las décadas siguientes el conjunto se fue degradando, lleno de maleza.
Por fortuna, en 2016 el sitio se cerró por completo y se iniciaron los trabajos de recuperación cultural pertinentes, que ahora, tras más de 4 años, se han completado para dejar el Mausoleo de Augusto abierto como atracción turística.
Las restauraciones, completadas en dos etapas, han costado más de € 10 millones. La primera etapa, financiada en parte por el Ministerio italiano de Patrimonio y Actividades Culturales y las autoridades romanas, se completó en 2019. Supervisó la restauración del monumento.
La segunda etapa, financiada por la Fondazione TIM, el brazo social de Telecom Italia, con una suma de € 6 millones, se ha concentrado en los espacios internos y la preparación para los visitantes. Se han realizado, por ejemplo, enormes obras estructurales para proteger el mausoleo y se ha reconstruido una escalera de caracol que conduce al techo del monumento.
La Fondazione TIM también ha financiado la restauración del espacio del entierro y el paisajismo de los alrededores.
Incluso la plaza exterior, la Piazza Augusto Imperatore, está siendo remodelada.
El sitio abrirá sus puertas al público el 1 de marzo de 2021. Las entradas para las visitas de 50 minutos, que serán gratuitas hasta el 21 de abril, deben reservarse con antelación en mausoleodiaugusto.it. A partir del 22 de abril, las visitas tendrán un costo a definirse que incluirá elementos de realidad virtual y aumentada, y ascensores.