El mundo empezará a perder segundos en sus relojes desde el año 2035
Científicos y representantes gubernamentales reunidos en una conferencia en Francia votaron eliminar los segundos intercalares para 2035, según informó hace unos días la organización responsable del cronometraje mundial.
De manera similar a los años bisiestos, los segundos intercalares se han agregado periódicamente a los relojes durante el último medio siglo para compensar la diferencia entre el tiempo atómico exacto y la rotación más lenta de la Tierra.
Si bien los segundos intercalares pasan desapercibidos para la mayoría de las personas, pueden causar problemas para una variedad de sistemas que requieren un flujo de tiempo exacto e ininterrumpido, como la navegación por satélite, el software, las telecomunicaciones, el comercio e incluso los viajes espaciales.
Ha causado un dolor de cabeza a la Oficina Internacional de Pesos y Medidas (BIPM), que es responsable del Tiempo Universal Coordinado (UTC) —el estándar acordado internacionalmente por el cual el mundo establece sus relojes—.
Ahora, los 59 estados miembros del BIPM y otras partes aprobaron una resolución para dejar de agregar segundos intercalares para 2035 en la Conferencia General sobre Pesos y Medidas, que se celebra aproximadamente cada cuatro años en el Palacio de Versalles, al oeste de París.
La jefa del departamento de tiempos del BIPM, Patrizia Tavella, dijo a la AFP que la «decisión histórica» permitiría «un flujo continuo de segundos sin las discontinuidades que actualmente provocan los segundos intercalares irregulares».
«El cambio entrará en vigencia antes de 2035», sentenció.
Dijo que Rusia votó en contra de la resolución, «no por principio», sino porque Moscú quería adelantar la fecha de entrada en vigor hasta 2040. Otros países habían pedido un plazo más rápido, como 2025 o 2030, por lo que el «mejor compromiso» terminó siendo el 2035.
Estados Unidos y Francia estuvieron entre los países que lideraron el camino para el cambio.
Tavella dijo que no se pierde la conexión entre UTC y la rotación de la Tierra.
«Nada cambiará para el público», enfatizó.
¿Un minuto bisiesto?
Los segundos fueron medidos durante mucho tiempo por los astrónomos que analizaban la rotación de la Tierra, sin embargo, el advenimiento de los relojes atómicos —que utilizan la frecuencia de los átomos como su mecanismo de tic-tac— marcó el comienzo de una era de cronometraje mucho más precisa.
Pero la rotación ligeramente más lenta de la Tierra significa que los dos tiempos no están sincronizados. Para cerrar la brecha, se introdujeron los segundos intercalares en 1972, y desde entonces se han agregado 27 en intervalos irregulares, el último en 2016.
Según la propuesta, los segundos bisiestos se seguirán agregando normalmente por el momento. Pero para 2035, se permitirá que la diferencia entre el tiempo atómico y astronómico aumente a un valor superior a un segundo, según comunicó Judah Levine, físico del Instituto Nacional de Estándares y Tecnología de EE.UU.
«Aún no se ha determinado el valor mayor», dijo Levine, quien pasó años ayudando a redactar la resolución junto con Tavella.
Se realizarán negociaciones para encontrar una propuesta al 2035 para determinar ese valor y cómo se manejará, según la resolución.
Levine dijo que era importante proteger la hora UTC porque está a cargo de «un esfuerzo de la comunidad mundial» en el BIPM.
El tiempo del GPS, un rival potencial de UTC gobernado por relojes atómicos, está a cargo del ejército estadounidense, «sin supervisión mundial».
Una posible solución al problema podría ser dejar que la discrepancia entre la rotación de la Tierra y el tiempo atómico aumente hasta un minuto. Es difícil decir exactamente cuánto tiempo podría llevar eso, pero Levine estimó entre 50 y 100 años.
En lugar de agregar un minuto bisiesto a los relojes, Levine propuso una «especie de marca», en la que el último minuto del día toma dos minutos.
«El avance de un reloj se ralentiza, pero nunca se detiene», concluyó.
Fuente: AFP. Edición: MP.