El campo magnético del Sol está a punto de invertirse: ¿Qué consecuencias tiene?
El cambio de polaridad indica el punto medio del máximo solar (el pico de actividad), y el inicio del desplazamiento hacia el mínimo solar, algo que podría ser benéfico para nuestro planeta.
Para entender la inversión del campo magnético, es esencial conocer el ciclo solar. Este ciclo, de aproximadamente 11 años, es impulsado por el campo magnético del Sol y se manifiesta en la frecuencia e intensidad de las manchas solares visibles en su superficie. Se espera que el próximo máximo solar ocurra entre finales de 2024 y principios de 2026.
Existe otro ciclo importante, aunque menos conocido, llamado el ciclo de Hale, que abarca dos ciclos solares de 11 años y dura aproximadamente 22 años. Durante este tiempo, el campo magnético del Sol se invierte y luego vuelve a su estado original.
En el mínimo solar, el campo magnético del Sol se asemeja a un dipolo, con un polo norte y un polo sur, similar al campo magnético de la Tierra. Pero a medida que nos acercamos al máximo solar, el campo magnético del Sol se vuelve más complejo, sin una separación clara de los polos norte y sur. Al pasar el máximo solar y llegar al mínimo, el astro regresa a un dipolo, aunque con una polaridad invertida.
El próximo cambio de polaridad será de norte a sur en el hemisferio norte, y viceversa en el hemisferio sur. Esto alineará la orientación magnética del Sol con la de la Tierra, que también tiene un campo magnético con orientación sur en el hemisferio norte.
¿Qué causa este cambio de polaridad?
La inversión es impulsada por las manchas solares, regiones magnéticamente complejas en la superficie del Sol que pueden desencadenar eventos solares significativos, como llamaradas solares y eyecciones de masa coronal (CMEs), que son grandes explosiones de plasma y campo magnético.
A medida que las manchas solares emergen cerca del ecuador, tienen una orientación que coincide con el campo magnético antiguo, mientras que las manchas cercanas a los polos se alinean con la nueva orientación magnética, según la ley de Hale.
«La inversión gradual del campo magnético no ocurre en un instante, sino que se desarrolla a lo largo del ciclo solar de 11 años», explica el astrofísico solar Ryan French. «No es como en la Tierra, donde la inversión se mide por la migración de los polos norte/sur. Puede tardar uno o dos años en completarse, aunque la duración puede variar significativamente».
El cambio de polaridad no es un signo de un apocalipsis inminente. Sin embargo, experimentaremos algunos efectos secundarios.
Consecuencias
La actividad solar reciente ha sido notablemente intensa, con numerosas llamaradas solares y CMEs, que han desencadenado fuertes tormentas geomagnéticas en la Tierra y producido impresionantes auroras.
Un efecto secundario positivo del cambio de polaridad es que ayuda a proteger la Tierra de los rayos cósmicos galácticos, partículas subatómicas de alta energía que pueden dañar naves espaciales y poner en riesgo a los astronautas. A medida que el campo magnético del sol se desplaza, la corriente heliosférica difusa se vuelve más ondulada, proporcionando una mejor barrera contra estos rayos cósmicos.
Los científicos estarán atentos a la inversión del campo magnético de nuestra estrella anfitriona para ver cuánto tiempo tarda en volver a una configuración de dipolo. Si ocurre en los próximos años, el siguiente ciclo solar de 11 años será relativamente activo. Si el proceso es lento, el ciclo será más débil, como el ciclo solar 24 anterior.
Fuente: Space.com. Edición: MP.