Documento desclasificado de la CIA muestra un intento de «visión remota» sobre una sede de la «Federación Galáctica»
Un documento desclasificado de la CIA, fechado en 1988 pero publicado casi una década después, muestra una sesión de visión remota que intenta mirar dentro de una de las sedes de la «Federación Galáctica» en la Tierra.
La CIA, junto con la Universidad de Stanford, llevó a cabo en el pasado un proyecto conocido como Stargate, destinado a investigar las habilidades y fenómenos «paranormales» de los que algunos humanos son capaces. Y uno de los programas bajo el paraguas de Stargate fue el de visión remota.
La visión remota es la capacidad psíquica de recibir información o impresiones de un evento, persona, objeto o lugar que se encuentren a gran distancia. Es considerada como una forma de percepción extrasensorial. El término se dio a conocer durante los años setenta por los físicos Harold Puthoff y Russell Targ, parapsicólogos del SRI International, para separarlo de la clarividencia —aunque según Targ, el término fue sugerido por primera vez por Ingo Swann en diciembre de 1971 durante un experimento en la American Society for Psychical Research en la ciudad de Nueva York—.
En resumidas cuentas, si tuvieras esta habilidad psíquica, podrías «ver» con precisión lo que hay en la cara oculta de la Luna o, para ser más geopolíticos, podrías espiar lo que hay dentro de un edificio específico en otro país si te dieran las coordenadas.
El programa del gobierno de EE.UU. se ejecutó durante aproximadamente 25 años antes de ser desclasificado y supuestamente «cerrado». De la literatura que se ha puesto a disposición, fue claramente muy exitoso y el fenómeno de visión remota fue bastante útil para la comunidad de inteligencia.
Un artículo publicado un año después de la desclasificación por el Dr. Puthoff, uno de los cofundadores del programa, afirma lo siguiente:
«Para resumir, a lo largo de los años, la crítica de ida y vuelta de los protocolos, el refinamiento de los métodos y la replicación exitosa de este tipo de visión remota en laboratorios independientes, ha producido una evidencia científica considerable de la realidad del fenómeno (visión remota). A la fuerza de estos resultados se sumaba el descubrimiento de que se podía encontrar un número creciente de personas que demostraban visión remota de alta calidad, a menudo para su propia sorpresa (…) El desarrollo de esta capacidad en SRI ha evolucionado hasta el punto en que personal de la CIA visitante, con ninguna exposición previa a tales conceptos, ha obtenido buenos resultados en condiciones controladas de laboratorio».
La Dra. Jessica Utts, ex directora del Departamento de Estadística de la Universidad de California, Irvine, y profesora allí desde 2008, afirma lo siguiente sobre el tema:
«En mi opinión, es una lástima que “habilidades especiales” como estas no se estudien dentro de la academia convencional, pero que se estudien en los niveles más altos de los gobiernos con la intención de recopilar información de inteligencia. Cuando se trata de tecnología, habilidades especiales o soluciones a los problemas del mundo, no es la tecnología, la capacidad de las personas o esas soluciones las que cambiarán el mundo, es la conciencia detrás de estas cosas. ¿Para qué utilizamos nuestros nuevos descubrimientos? ¿Cuál es nuestra intención? ¿Los usamos para promover la experiencia humana y para el bien de todas las personas, o para algo más? Es por eso que las soluciones que surgen en varios campos, como la tecnología de energía limpia, por ejemplo, nunca se implementan».
Visión remota y la «Federación Galáctica»
La literatura desclasificada tiene numerosos ejemplos de experimentos exitosos de visión remota y también ejemplos del mundo real. Es seguro asumir que el programa completo y su contenido no fueron desclasificados, y esto parece evidente por el testimonio de múltiples visualizadores remotos de la CIA/militares que fueron parte verificable del programa durante muchos años. Un tema común entre muchos de los visualizadores es su gran interés en el fenómeno extraterrestre. ¿Por qué? ¿Influyó su experiencia en el programa de visión remota en esta gran creencia e interés? ¿Hay algo que no nos hayan dicho?
Llegaremos a eso un poco más adelante, así como a más ejemplos. Ahora entraremos en mayor detalle sobre el título de este artículo, brindándoles aquí un enlace a una sesión de visión remota realizada por la CIA para ver una presunta sede de la «Federación Galáctica» en la Tierra.
A continuación se muestra una captura de pantalla del documento; pueden acceder a la versión completa aquí. No está claro quién es el visualizador remoto. En muchos otros documentos del programa, los nombres suelen aparecer en la lista.
Es interesante que esta sesión de visión remota se llevó a cabo en 1988. En primer lugar, ¿de dónde sacaría la CIA la idea de siquiera buscar algún tipo de federación galáctica? Suscita muchas preguntas.
La idea de que existe algún tipo de «federación galáctica» de razas que representan una fuerza benevolente en nuestra galaxia o universo no es una idea nueva. Los canalizadores o «contactados» —aquellos que afirman estar en comunicación telepática con diferentes grupos de extraterrestres— han transmitido esta idea a la raza humana durante muchas décadas.
Esta noción se popularizó más recientemente cuando Haim Eshed, exjefe de la dirección espacial del Ministerio de Defensa de Israel, ex general y profesor respetado, afirmó que EE.UU. e Israel han estado en contacto con extraterrestres inteligentes durante bastante tiempo. Él se refirió específicamente a la «Federación Galáctica» enfatizando cómo están esperando que la humanidad evolucione, y que no estamos listos para el contacto. (Puedes leer más sobre esa historia AQUÍ).
Luego que la publicáramos en Mystery Planet directamente de las fuentes israelíes, la historia fue recogida por varios sitios afines y medios masivos de comunicación. La mayoría de estos últimos cubrió el tema con cierto tinte de ridiculez y algunos de ellos insinuaron la idea de que Eshed había perdido la cabeza.
Es interesante notar que cuando surge una historia sobre supuestos extraterrestres que nos instan a elevar nuestro nivel de consciencia, ésta se ridiculiza por completo; mientras que otros incidentes con un sesgo narrativo de amenaza —como aquellos relacionados con el incidente ovni del Nimitz— se toman completamente en serio.
Otros ejemplos que hablan sobre extraterrestres
Según Lyn Buchanan, unos de los sujetos involucrados en los experimentos del Proyecto Stargate:
«Después del ejército, una rama del gobierno me pidió que hiciera un artículo, un artículo de estudio para comparar y contrastar la habilidad psíquica ET con la habilidad psíquica humana.
»El estudio que hice fue porque me dieron acceso a muchas de las cosas que nunca llegaron a las manos del proyecto Grudge o el Blue Book, ni nada por el estilo, porque no podían negarse.
De todos modos, al estudiarlos, descubrí que podemos tomar los extraterrestres de todos los tipos y especies diferentes y todo eso y clasificarlos en cuatro categorías principales. Tenemos aquellos que son más psíquicos que nosotros y aquellos que son menos. En cada una de esas dos categorías tenemos especies amigables y hostiles hacia nosotros.
»Los que no son psíquicos y son hostiles tienden a no venir aquí. No les agradamos, no quieren estar cerca de nosotros. Los amigables que no son psíquicos vienen aquí solo para comerciar. Y los amigables psíquicos realmente quieren ayudarnos a desarrollar nuestras habilidades y ser más fuertes en ello. Por último, los psíquicos hostiles quieren que nos borremos del planeta, nos quieren muertos, punto, sin hacer preguntas».
También menciona bases extraterrestres que están en la Tierra, y dice que hay aproximadamente cinco. Menciona que todas están dentro de montañas y que en algunas de estas bases los humanos están trabajando con estos extraterrestres de varias maneras.
Pero los ejemplos de este tipo de experimentos no se limitan a bases extraterrestres en nuestro planeta. En 2017, la CIA publicó un documento en donde Marte era el objetivo. Allí se menciona —llamativamente— una supuesta civilización marciana extinta, que otrora habría habitado la superficie del planeta rojo, siendo algunas de las anomalías detectadas hoy en día —tomadas por los científicos como rarezas geológicas—, en realidad ruinas de pirámides y demás monumentos artificiales.