MISTERIO

Elon Musk muestra a un mono que puede escribir gracias a un implante cerebral

Solo esperemos que —tal Sr. Burns— no reúna mil monos y mil máquinas de escribir para terminar la novela más grande de la historia.

Captura del evento de Neuralink (video con resumen más abajo).

Durante una demostración el jueves por la noche, el CEO de Tesla y SpaceX, Elon Musk, mostró en qué ha estado trabajando Neuralink, su startup de interfaz cerebro-computadora (BCI).

La compañía mostró imágenes de un mono que, según dijo, podía «escribir» en un teclado en pantalla usando un chip del tamaño de una moneda incrustado en su cerebro. Obviamente, el mono no pudo descifrar el significado de las letras escritas; simplemente se limitó a mover el cursor para hacer clic en las letras previamente resaltadas para obtener una recompensa en forma de batido de frutas.

«Es como reemplazar una parte de tu cráneo con un smartwatch, a falta de una mejor analogía», dijo Musk en el evento, prometiendo implantarse uno de los dispositivos en su propio cerebro.

Y si bien esto puede parecer un avance impresionante, este tipo de tecnología ha existido durante décadas. Por ejemplo, a docenas de pacientes ya se les ha implantado un dispositivo de «matriz de Utah» en sus cerebros, lo que les permite controlar brazos robóticos o escribir letras.

Lo que Neuralink ha podido aportar, aseguran los expertos, es una interfaz inalámbrica más elegante, lo que la hace potencialmente menos torpe que la tecnología existente. Las matrices de Utah son voluminosas, sobresalen del cráneo y requieren que los usuarios estén físicamente conectados a la computadora.

Durante la presentación, también se mostró el gran robot «cirujano» que se usará para implantar su chip —denominado N1—, en un orificio en el cráneo, donde puede interactuar con el cerebro.

Asimismo, Musk se jactó de que a los humanos se les podría implantar el dispositivo en seis meses. Sin embargo, ese lapso de tiempo es extremadamente ambicioso, más considerando el historial de la compañía. En última instancia, el permiso para probar la tecnología en humanos solo puede ser otorgado en los Estados Unidos por la Administración de Alimentos y Medicamentos.

Volviendo a ver

El magnate hizo otras promesas extremadamente elevadas sobre Neuralink en el evento, afirmando que el dispositivo podrá devolver la vista a aquellos que nunca antes habían podido ver y permitir que las personas con parálisis vuelvan a caminar.

Esas afirmaciones se basan en promesas anteriores que hizo de que el dispositivo algún día podría «resolver» el autismo y la esquizofrenia, e incluso transmitir música directamente al cerebro.

«Nuestro objetivo será encender las luces para alguien que ha pasado décadas viviendo en la oscuridad», dijo el investigador de Neuralink, Dan Adams, durante la presentación.

No obstante, por ahora la compañía tiene mucha tarea que hacer antes de poder realizar tal visión. Es seguro que enfrentará una batalla cuesta arriba para lograr implantar su primer chip cerebral en un ser humano, luego de otros experimentos con ovejas y cerdos, así como con monos. Los reguladores aún tienen que evaluar el daño potencial que un dispositivo de este tipo podría causar al cerebro humano.

Luego está la cuestión de cuánto tiempo podría durar un dispositivo de este tipo dentro del cráneo sin romperse o corroerse, algo que ya ha resultado difícil para otros dispositivos BCI.

Y eso sin mencionar si alguien debería confiar en el infame enfoque de ingeniería de «moverse rápido y romper cosas» de Musk cuando se trata de permitir que un robot inserte un microchip dentro de su cráneo.

Fuente: NYTimes/Neoscope. Edición: MP.