Misteriosas cámaras excavadas en la roca son halladas en un acantilado de Abidos, Egipto
Se cree que por su cercanía a una necrópolis podrían tener un significado religioso.
Un equipo de la misión de prospección arqueológica que opera en la región de la meseta desértica, al oeste de Abidos (Alto Egipto), reveló un grupo de aberturas distribuidas en la ladera elevada de un acantilado.
El Dr. Mustafa Waziri, Secretario General del Consejo Supremo de Antigüedades, explicó que estas aberturas se encuentran en el área del valle sagrado al sur del cementerio real en Umm al-Qa’ab, y su antigüedad se remontaría a la era ptolemaica (323-30 a.C.).
Después de un examen cuidadoso, se descubrió que estas entradas conducen a cámaras cortadas en la roca, que no tienen más de 1.20 metros de altura, y que la mayoría varían entre una y dos habitaciones —aunque hay algunas con tres y otro grupo formado por cinco habitaciones conectadas entre sí a través de rendijas estrechas cortadas a través de las paredes de roca que las separan—.
Mohamed Abdel-Badi, jefe del Departamento Central de Antigüedades del Alto Egipto y jefe de la misión, dijo que estas habitaciones no están decoradas y se ubican sobre pozos verticales profundos unidos a túneles de agua naturales. Asimismo, el experto detalló que muchas de ellas contienen fragmentos de cerámica, bancos, terrazas, una serie de círculos hundidos o nichos cortados en el piso, además de una serie de pequeños agujeros en las paredes directamente debajo del techo, y huecos o asideros cerca de las aberturas de entrada, donde probablemente iban enganchadas cuerdas.
La misión también encontró una habitación con inscripciones que contienen los siguientes nombres: Khuusu-n-Hor, su madre Amenirdis, y abuela Nes-Hor.
Por su parte, el Dr. Matthew Adams, del Instituto de Bellas Artes de la Universidad de Nueva York y codirector de la Misión Norte Abidos, dijo que estas cámaras no son cementerios, ya que no hay indicios de que ninguna de ellas se haya usado para el entierro. Sin embargo, su presencia dentro del valle sagrado al sur del cementerio real en Umm al-Qaab (que en el antiguo pensamiento egipcio era el camino hacia el otro mundo) y su ubicación en un nivel alto y difícilmente accesible del acantilado, podría indicar que estas construcciones tenían una gran importancia religiosa.
Fuente: Ministerio de Turismo y Antigüedades. Edición: MP.