Una tormenta geomagnética podría destruir el mundo

Desde hace unos años, el mundo se ha encontrado en vilo por la inmensa cantidad de terremotos que se han generado en el planeta y, a pesar de que los expertos aseguran que son formaciones naturales, algunos piensan que podría haber una causa mayor. Cuando la teoría de que Marte fue arrasada por una tormenta geomagnética salió a la luz, muchas miembros de la comunidad científica salieron desesperados a «calmar» a la población, alegando de que es imposible de que ocurriera lo mismo en la Tierra, a pesar de que varios astrónomos no tan reconocidos aseguraban que, aunque nuestros campos magnéticos fueran distintos, aún cabía la posibilidad de que una actividad solar lo suficientemente fuerte pudiera ser peligrosa. Ahora, un nuevo estudio revela que el catastrófico terremoto de México pudo ser provocado por una tormenta geomagnética.

¿El terremoto de México fue culpa de una tormenta geomagnética?

El estudio fue realizado por un investigador de la UAQ (Universidad Autónoma de Querétaro). En él se afirma que la actividad solar, como las tormentas geomagnéticas, podrían estar activando el campo magnético de la Tierra y este, a su vez, provoca movimientos en las placas tectónicas, desencadenando sismos tan poderosos como el que devastó parte de México.

De acuerdo con la investigación que ha estado llevando a cabo el coordinador de Ingeniería Civil de la universidad, Omar Chávez Alegría, los sismos también pueden ser consecuencias de algún elemento electromagnético antes que uno mecánico.

La investigación contradice la teoría con la que nos han «calmado» durante muchos años, la cual asegura que el movimiento mecánico en las placas tectónicas de la Tierra solamente lo provoca la fricción en la corteza y la consecuente liberación enérgica de esos movimientos telúricos.

Los resultados dela investigación revelan que se ha hallado una relación entre la actividad solar y los terremotos, por lo dicho fenómeno se origina como una consecuencia de la influencia externa al globo terráqueo capaz de estimular el campo magnético, y no solo internamente como se creía hasta ahora.

En palabras más sencillas: nuestro planeta sí puede ser destruido por una tormenta geomagnética colosal.

¿El campo magnético de la Tierra es afectado por las tormentas geomagnéticas?

A pesar de que aún no se tiene mucha información de lo que hay bajo la Tierra, se hacen suposiciones sobre como es exactamente la corteza terrestre, por ejemplo. Se suponía que esta era rígida completamente, pero las últimas excavaciones evidenciaron que es más fluida que dura, y sumamente superficial en muchos puntos de la corteza. Por ello, es imposible realizar una excavación, ya que el metal de las máquinas se fundiría.

De la misma forma, Alegría destaca que el efecto luminosos en la atmósfera que se apreció en la Ciudad de México previo y durante al terremoto del siete de septiembre, y el cual se vio en diferentes localidades de México, y con tintes azulados, verdosos y rojizos, podría haber sido provocado por uno de los muchísimos fenómenos eléctricos en el cielo. Uno de ellos se refiere con la ionización de la atmósfera, o sea, el proceso de la producción de átomos o moléculas cargadas de electricidad. Esto pudo haberse generado por el campo magnético del planeta o por la misma tormenta geomagnética.

¿Por qué la NASA ocultó el alcance de las tormentas geomagnéticas?

Realmente se puede dudar que organizaciones tan respetadas como la NASA, los cuales tienen a su alcance tecnología mucho más avanzada, no supieran que las tormentas geomagnéticas, como aquellas que, en algún punto de la historia del universo, destruyó a Marte por completo, acabando incluso con la posibilidad de vida desarrollada o en proceso de desarrollo, transformándola en el desierto helado que es hoy en día, pudiera hacer lo mismo con la Tierra.

¿Qué planean? Existen muchos expertos que aseguran que el plan del nuevo orden mundial es la disminución drástica de la población mundial, ya que solo unos pocos serán los elegidos para ir con ellos a su próximo destino. No sabemos realmente qué es el beneficio de omitir este tipo de datos, pero ya es seguro de que el planeta si puede ser destruido por una tormenta geomagnética.