La historia de la corrupción de los ángeles –

Todos presumimos que los ángeles fueron creados puros e inmaculados, sin embargo, el libro apócrifo de Enoc revela que en tiempos ancestrales una parte de los estos seres de luz se corrompieron con los bajos deseos carnales y se dejaron seducir por las hijas de los hombres, fornicando con estas y trayendo al mundo una descendencia de híbridos mitad humanos mitad ángeles, que fueron los hombres antediluvianos que poseían gran inteligencia y portento físico pero nada de bondad, por lo que en esos tiempos la ciencia avanzó considerablemente pero todas sus obras tenían una tendencia destructiva, por lo que el Creador tuvo que intervenir y purificar el mundo mediante un diluvio universal.

Amenaza universal

Muy probablemente el libro de Enoc no fue incluido en el canon bíblico oficial debido a las pretensiones de las élites eclesiásticas de esconder estas verdades, no obstante, de alguna u otra forma han salido a la luz, principalmente luego del descubrimiento de los rollos del Mar Muerto que han venido a confirmar y complementar estos testimonios documentados desde hace miles de años.

En las páginas de este revelador libro se indica que hace cientos de miles de años se levantó una generación de hombres presuntuosos, que pretendieron desafiar el orden universalmente establecido y por ello comenzaron a representar una amenaza para el resto de las civilizaciones que hacen vida en nuestra galaxia.

En este aspecto los Nefilim que eran los descendientes de los ángeles que se mezclaron con las hermosas damas ancestrales, desarrollaron una avanzada tecnología entre la que se encontraban cohetes nucleares con alcance interplanetario y la clonación descontrolada de especies animales, como ocurrió con los lagartos que terminaron convirtiendo en los grandes dinosaurios producto de mutaciones de laboratorio, entre otras calamidades.

Ante esta situación los humanos/ángeles de la época recibieron advertencias de las autoridades cósmicas, pero hicieron caso omiso pues se consideraban a sí mismos dioses todopoderosos, por lo que el poder supremo del universo tuvo que intervenir destruyendo a la civilización humana mediante un diluvio y salvando solo a una familia de elegidos para preservar la supervivencia de la humanidad.

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